lunes, 21 de septiembre de 2015

El Obelisco sin punta


Desde la Avenida 9 de Julio, el ícono porteño sorprende a todos por encontrarse sin punta y se vé cortado. Además, en la puerta del MALBA, puede encontrarse la punta del Obelisco y se puede entrar y mirar por las ventanas como si estuviera a 70 metros de altura forma  parte de la obra "La democracia del Símbolo" del artista argentino Leandro Erilich. Sin embargo, la punta nunca fue removida, sigue allí.​



La imagen, tomada desde un drone, descubre el secreto y muestra cómo el extremo del monumento está recubierto por paneles espejados que crean la ilusión óptica. 
Así son las vistas de cada ventana que sugiere la visión panorámica desde su punta.

 Se trata de una estructura de hierro con revestimiento muy similar al hormigón original, que lo deja de su misma altura. "Quedará así una o dos semanas, porque queremos fomentar el arte en el espacio público, para que se convierta en un lugar donde la gente se quiera quedar y comentar". Según Erlich. "Se trata de democratizar los espacios y hacer que la historia sea revisitada por todos".



La instalación realizada por un artista argentino fue concretada después de seis meses de trabajo y de coordinación con la Policía Metropolitana, ingenieros, técnicos y tres secretarías del gobierno porteño. La ilusión óptica" es un punto de partida, una forma de involucrar al espectador en una experiencia dentro de la historia de la obra. Esa sorpresa, ese pequeño descubrimiento de algo que no era como pensábamos, genera algo muy positivo y demuestra que todavía hay cosas por descubrir, por pensar é inventar.